Venezuela es la esperanza y la llama revolucionaria de América Latina

Foto Archivo.

Cómo podríamos salvar a la revolución, ésta como otras interrogantes se las hacen muchos adeptos del chavismo pero detrás de todo lo que es la ideología bolivariano-chavista, hay un gran proyecto social que debemos salvar.

Estamos viviendo en Venezuela y el mundo momentos claves para las decisiones que tomemos desde el ahora, pues un acto en fallo podría desencadenar un efecto dominó que arrasaría con el proyecto que llego a Venezuela en 1999.

Nuestro mandatario Nicolás Maduro debe en este momento ser radical en sus decisiones, tajante, taxativo, ante la ola de miseria que vende la derecha ácida como verdades a todo el pueblo venezolano, pero para entender un poco se debe analizar.

El proyecto que se llama Revolución Bolivariana liderado por el comandante Chávez y ahora por el presidete Nicolás Maduro y el pueblo heroico, es sin un duda un proyecto que engloba el bienestar no sólo de Venezuela sino de todo el bloque latinoamericano, pues gobiernos extranjeros nos han impuestos modelos económicos que nos han plagado de miseria y hambre.

Muchos de nosotros nos preguntaríamos ¿pero cómo fue que el gobierno venezolano fallo ante el ataque económico en el cual somos víctimas en este momento? Sería importante resaltar lo siguiente: El modelo rentista “petróleo” no ayudo en los últimos 20 años a transformar la historia de Venezuela, pues todo el dinero que entraba al país por los negocios petroleros fueron destinados al desarrollo del país en los aspectos sociales, económicos, políticos, tecnológicos, alimentario, salud, infraestructura y cultural.

Venezuela es la punta de lanza, es la que despertó a los pueblos dormidos de América Latina, es quien con su integración y la visión de un mundo multipolar pudo darle la vuelta al mundo con un mensaje muy claro y es que La Revolución es el camino.

Pero en los últimos años gobiernos extranjeros que manejan a su manera la economía mundial , sabotearon el mercado petrolero para que se produjera lo que hoy estamos viviendo en Venezuela y el mundo la crisis económica, hay que destacar que en algunos países la crisis se ha sentido más que en otros.

Venezuela se encuentra en una situación delicada, pues la economía del país está bajo el constante boicot de un grupo empresarial que se ha sumado a las líneas estratégicas que tiene EE.UU., contra nuestra nación.

Estos apátridas actúan diariamente como si le importará realmente la situación del país, salen a diario por todos los medios de comunicación privados del país y del extranjero, culpabilizando a Nicolás Maduro y al Gobierno Bolivariano de los culpables de la crisis financiera en Venezuela.

La realidad es otra, si calculamos los hechos que comprometen a los EE.UU., en el constante atropello hacia nuestra patria, el saboteo en el marcado petrolero mundial, para que el ingreso monetario tenga una constante recaída en las estadísticas, encontraríamos otros culpables ya que las líneas para atacar a Venezuela se han evidenciado, se les ha caído el maquillaje.

Lo cierto de todo esto, es que El gobierno venezolano debe potenciar sus fuerzas revolucionarias y seguir en el combate, pues se pone en juego la estabilidad y el futuro de Venezuela y el bloque latinoamericano, pues el proyecto bolivariano engloba la unión de nuestras naciones y el desarrollo mutuo y respetuoso como la autodeterminación contra la injerencia extranjera.

Nicolás Maduro Moros está liderando junto al pueblo venezolano una batalla épica, pues los poderes de la derecha internacional tienen los ojos puestos en Venezuela, podríamos decir que estamos en el ojo del huracán, ya que el destino del bloque latinoamericano visionándonos en la Carta de Jamaica, esta tambaleante, pues el veneno derechista radical, está nuevamente inoculado en las mentes de muchos latinoamericanos y estos están actuando a una inclinación ideológica errada. Están amando al verdugo que nos fustiga.

El gobierno bolivariano debe encargarse de hacer una guerra de la verdad, a través de los aparatos ideológicos del Estado, pues el país que soñamos está vía del socialismo, no en los modelos capitales de siempre, tenemos que recalcarle a cada persona que quienes ahora lideran la Asamblea Nacional, no están por el bienestar del pueblo venezolano, están por el bienestar de los Amos del Valle.

Viviremos y Venceros camaradas, no podemos dejar que apaguen la llama sagrada de la patria, ni la llama roja de la revolución.

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